![]() |
| Fotografía de Chlorell |
Todas las tardes un anciano acostumbra a dormir la siesta. Sus nietos, que son decenas, le preguntan por qué lo hace. "Voy al país de los sueños para encontrarme con nuestros antepasados". Al dormir, el viejo sueña que conversa con sus más sabios ancestros. "Un día, transmitiré estas enseñanzas a mis descendientes." Sin embargo, el tiempo pasa y el anciano no transmite ninguna enseñanza. De modo que los nietos, todos, resuelven dormir la siesta una tarde muy calurosa. Apenas despiertan, le dicen a su abuelo: "Fuimos al país de los sueños para encontrarnos con nuestros antepasados". Lleno de curiosidad, el viejo quiere el mensaje de los venerables ancestros. Uno de los nietos dice: "Llegamos al país de los sueños, nos encontramos con nuestros antepasados y preguntamos si era verdad que nuestro abuelo venía aquí todas las tardes. Ellos nos respondieron que jamás te habían visto. Dicen que no conocen a ningún abuelo".
Eduardo Berti, Fragmento de la novela El país imaginado, Impedimenta, 2011.

Y Berti también me gusta mucho.
ResponderEliminar